El ambiente de París

2 de abril de 2015

Frédéric Chopin: “París responde a todo lo que el corazón desea. Uno puede divertirse, aburrirse, reír, llorar o hacer lo que se le antoje sin llamar la atención, puesto que miles de personas hacen otro tanto…y cada uno como quiere”.

Ça c’est Paris!
Ça c’est Paris!

Paris c’est une blonde
Qui plaît à tout le monde
Le nez retroussé l’air moqueur
Les yeux toujours rieurs
Tous ceux qui la connaissent
Grisés par ses caresses
S’en vont mais reviennent toujours

Paris à tes amours!

La petite vogue de Paris
Malgré ce qu’on en dit
A les mêmes attraits qu’Hollywood
Oui mais… Elle possède à ravir
La manière de s’en servir
Elle a perfectionné la façon de se donner

Ça c’est Paris!
Ça c’est Paris!

Hace muchos años contaba cada una de mis visitas a Paris, hasta que llegó el momento que perdí la cuenta, lo que reconozco es que siempre que vuelvo me hace sentir bien, me da luz, me emociona, me llena y como Chopin dijo:

Uno puede divertirse, aburrirse, reír, llorar o hacer lo que se le antoje sin llamar la atención, puesto que miles de personas hacen otro tanto…y cada uno como quiere”.

Este espíritu de libertad y cosmopolitismo crea ambientes geniales, esos que me gustan, entre los músicos de las calles, los niños a su aire y mujeres y hombres con estilos impecables, París no se acaba nunca.

Escribir sobre esta ciudad es difícil, es imposible describirla, no es fácil sorprender, pero descubrir y mostrar ambientes actuales me gusta y en este último viaje me he dedicado a eso y ha sido fantástico.

Esta vez fue el barrio de Marais, hay que empezar por la Place des Vosges, la plaza más antigua de Paris, visitar la casa en donde vivió Victor Hugo que está en el número 6 y sentarse a almorzar en uno de los restaurantes más clásicos «Ma Bourgogne», con ambientazo total, (os sugiero la terraza), caminar por la rue des Francs-Bourgeois, y visitar el Museo de Carnavalet uno de los principales escenarios de la época napoleónica seguir ruta callejeando y entrando sin pensarlo a las pequeñas tiendas del barrio, encontraréis objetos ideales de todo tipo, seguir y seguir hasta llegar al Museo Picasso, en la 5 Rue de Thorigny, en el Palacio Salé construído entre 1656 y 1660, que ha sido reabierto en Octubre de 2014 después de una gran restauración.

París está al día, me ha llamado la atención hasta el tapiz de los asientos en el metro, con colores actuales y con un tejido que es agradable, otro detalle los paneles de seguridad para evitar accidentes en los andenes.

Nos hospedamos en el Prince de Gales, un hotel en el que hemos vivido momentos importantes de nuestras vidas. Lo han renovado y el cambio merece la pena vivirlo. Los pasillos que llevan a las habitaciones están decorados con fotografías de muy buen gusto en blanco y negro que recuerdan las maravillosa época de Coco Chanel.

Las habitaciones están completamente actuales, se nota en cada detalle. Visitamos varias suites y la verdad es que el Prince de Gales es especial.

Como ya decía yo en el principio, es difícil contar en unas líneas lo que es París y cómo ser feliz en ella, ¡hay tantas cosas por descubrir que ya quiero volver! Oui!! Je t’aime Paris.