El Papa ya está en México. En el encuentro con él, le entregué mi carta.El son de la Negra y un sombrero mexicano lo han recibido al puro estilo mexicano

 

Saludar al Papa es un momento especial. El protocolo que marca el Vaticano, es rígido, y los segundos que duran los encuentros se pasan volando. Impone su presencia, y en en caso del Papa Francisco, lo que impone es su cercanía y su simpatía.

Es un Papa que necesita el contacto con la gente, lo disfruta cada vez -esto dicho por él mismo-. Muchas veces me pregunto que vitaminas toma para aguantar tantas horas rodeado de miles de personas.

Este encuentro coincidió con una conversación que había tenido con amigos mexicanos, que viven hace años en el extranjero. Me hicieron reflexionar sobre tantas cosas, que quise comentárselas.

Le entregué este sobre con un mensaje, trasmitiéndole un deseo que muchos mexicanos me han expresado, al que me uní rápidamente, pues el no vivir en México, no quita que esté al día, siguiendo los acontecimientos de este nuestro gran pais.

El Papa llegó ayer a la ciudad de México, con un espectacular recibimiento. Cientos de personas cantaban Cielito Lindo ondeando un pañuelo blanco, un mariachi le esperaba y un ballet bailaba El Son de la Negra. 

Son canciones que los mexicanos llevamos en la sangre, las canciones que remueven los mas profundos sentimientos

 

 

 

Estoy segura que el Papa Francisco recordará las letras que están dentro de este sobre.