Giorgio Armani no para. Recientemente se ha unido a Piaggio y ha creado la Vespa 946 Emporio Armani. Para celebrarlo, la casa organizó un fiestón en su tienda de Vía del Babuino en Roma y después un espectacular cóctel en Villa Medici.

Este año se celebra el 40 aniversario de la fundación de la casa creada por Giorgio Armani y el 130 aniversario del Grupo Piaggio. Armani se ha liado la manta a la cabeza y se ha unido a la famosa empresa de motos y a creado la suya con «aire Armani» .

Siguiendo la paleta que más le gusta, en tonos grises con un poco de tono verde, el cual sólo se ve con determinada luz, la Vespa 946 evoca el año que nació el diseñador : 1946. Desde luego que la Vespa es una símbolo italiano a toda costa, y él defendiendo siempre su país, ha creado esta pieza discreta y elegante.

El día de la fiesta, el tráfico en las calles cercanas a la Piazza de Spagna estaba cortado. La gente en la calle sabía que algo gordo sucedía en Roma, tanto en la Vía del Babuino como enfrente de la Villa Medici, que montaron un buen despliegue, como se hace en las grandes ocasiones.

Ya dentro de la Villa, colocaron un photocall clásico por el que desfilaron muchos italianos famosos que no se les encuentra fácilmente en las calles de Roma.

Para los grandes actos en Roma, a pesar de sus calles empedradas, las invitadas féminas no se dejan los tacones en casa, aunque yo sí. Todavía me cuesta caminar con plataformas en estas calles empinadas romanas. Me gustaría que me recogieran en la puerta de casa y me hicieran la sillita de la reina hasta llegar al sitio de la fiesta.

Esta vez, para asistir al cóctel que ofrecieron en la tienda del Vía del Babuino, no había problema para llegar sin dejarse un tacón enganchado en el empedrado, pero para llegar a la gran fiesta en Villa Medici, a pesar de que había servicio de transporte para los invitados, había que caminar desde la entrada de la Villa, preciosa iluminada con velas, hasta lo más alto del palacete. ¡Toda una odisea para ir con tacones! Pero, aunque uno decida ir cómoda de vez en cuando, en algunos momentos me sentía la más enana de toda la fiesta, sí sí, lo confieso sin problema.

No sólo había invitados italianos. Tuve la suerte de estar con la actriz española Pilar Abella, que después de un año de haber dado a luz a mellizos, está otra vez guapísima y espectacular. Pilar, que vive en Roma, conoce a medio mundo y ha sido un no parar de presentarme gente estupenda e interesante. Actrices, modelos, señoras y señores guapísimos y elegantísimos. Ha sido una velada fantástica que no estaría mal repetirla de vez en cuando.

Os dejo algunas imágenes de la fiesta, mejor dicho ¡FIESTÓN!