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El protocolo oficial para Jefes de Estado en el Vaticano

Hay muchas historias escritas sobre el protocolo para las visitas oficiales al Papa, como la vestimenta, lo que hay y lo que no hay que hacer…, pero es interesante analizar los pasos que se dan en el Patio San Dámaso, previos a la llegada del invitado.

DESDE-DENTRO

Vista desde hall del Palacio Apostólico hacia la Plaza de San Pedro

 

Después de pasar por varios controles y caminando por las columnas de la Piazza San Pietro, accedemos al Palacio Apostólico. Allí dentro, esperamos unos minutos a que nos permitan el paso al Patio San Dámaso dónde llegará la visita oficial al Papa.

La prensa tenemos destinado un espacio a unos pocos pasos de donde va a llegar el Jefe de Estado, por lo que nos colocamos en el área reservada a la prensa y preparamos nuestros equipos. Durante la espera, observamos desde nuestra posición los movimientos que se van desarrollando en el patio.

Unos minutos después, hacen su entrada los gentiles hombres del Papa, vestidos protocolariamente con frac y chaleco blanco cruzado con seis botones, corbata con lazada y cadena de oro con las cruces de San Pedro. Los «gentiles hombres»  son los que acompañarán a los integrantes de la delegación del invitado desde que llegan al Palacio Apostólico. Esta figura es de gran tradición en El Vaticano. Son nombrados exclusivamente por la Santa Sede, personas que pertenecen a la nobleza y que han adquirido méritos respecto a la Iglesia Católica. No existe honor más grande concedido por la Santa Sede a un católico laico.

Uno de los «gentiles hombres» es el Príncipe Hugo de Windisch-Graetz, esposo de la Princesa Sophie de Habsburgo. 

HUGO

Príncipe Hugo de Windisch-Graetz, a la izquierda en la primera fila.

 

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Los Gentiles Hombres esperando a la visita con el Prefecto de la Casa Pontificia George Gaenswein 

 

La llegada de un Jefe de Estado al Patio San Dámaso paso por paso:

 

VISTA

Vista del Palacio Apostólico desde el Patio San Dámaso terminado el acto

yo ya

Foto de recuerdo, terminado el acto, de la visita de Vladimir Putin al Papa Francisco. 

 

Alicia Romay

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